LAS OLAS Y EL MAR
O L A S
Nadie sabe del mar más que las olas,
acercan lo profundo a las orillas
y dejan en la arena
la huella del final de su camino
cuando la lluvia cae sobre la piel del viento
y ese cielo de plomo cubre como las lágrimas
la mirada desde de la aurora.
También sabe del mar y de su canto
tu cuerpo dibujado en la mañana
en agua que cincela a vida lenta
la roca que se afirma entre mis días.
Volveremos después de la tromenta
a las playas de entonces, sobre el tiempo,
en la nube, la estrella, en algún canto
que celebre la caricia del mar.
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